Don Antonio Mª Rouco Varela pone a prueba mi fe.
Este señor que ocupa un puesto relevante en la sociedad española, es de suponer que ha leido El Evangelio, pero no se le nota.
Se sienta en su trono eclesial y lo mismo preside la Conferencia Episcopal que una ceremonia de Estado.
Se permite decir todo lo que se le pasa por la cabeza sin mas miramiento.
Nos mira con malos ojos como si todos estuvieramos empecatados ¡él tiene la exclusiva de Dios y sabe lo que Él quiere y por qué suceden los acontecimientos que nos azotan. No es por la desregulación de los mercados, no es por el enriquecimiento abusivo de unos pocos, no es por la privatización de los servicios básicos, no es por la especulación ¡NO! es porque el pueblo se ha alejado de Dios.
Y se queda tan tranquilo en su Palacio Arzobispal.
Cualquier parecido con aquel desharrapado que andaba con prostitutas, y echaba en cara a los poderosos sus perversiones, comia con sus amigos y no tenia casa...¡es pura casualidad!
A aquel lo mataron y a Don Antonio Maria le va a quedar una buena pensión.
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