A esta esquina le sobra un rótulo, una valla de obras, un contenedor de basura y alguna cosa mas, pero le faltan tantas cosas...Le falta la presencia de una familia que vivia y se amaba en ese espacio, la abuela tocaba el organo en la iglesia, las niñas iban al colegio, los padres se sentaban en la puerta con sus amigos. Antoñico guardaba los manteles del altar en la sacristia y veia pasar por la calle a Hilario.
Me gustaría dar marcha atrás en la máquina del tiempo.
Es como si el escenario se hubiera quedado vacio de actores y solo quedara el decorado.
Creo que es la primera vez que me da un ataque de nostalgia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario