Veo crecer a mis nietos, mis hijos se van haciendo mayores y nosotros vamos envejeciendo a ojos vista.
A veces, solo a veces, siento el vértigo de estar llegando al final del camino.
Todos mis momentos se perderan como lagrimas en la lluvia.
Bien, Felisa me ha dado la clave, formar parte de la lluvia es seguir en el camino
¡GRACIAS!
¡GRACIAS!